Las características principales de los equipos productivos

La brecha entre la teoría y la realidad de la productividad del equipo varía de una organización a otra. Es posible que equipos con estructura igual, niveles similares de conocimientos y experiencia, los mismos principios rectores e incluso acceso a recursos no necesariamente se desempeñen al mismo nivel o logren resultados similares. En las siguientes líneas, identificaremos una serie de características compartidas que se encuentran comúnmente entre los equipos de alto rendimiento y brindaremos sugerencias prácticas sobre cómo promover el desarrollo de las cualidades en cuestión.

¿Qué hace que los equipos se desempeñen mejor?

El área de colaboración en equipo no es una ciencia exacta. El éxito de una relación de colaboración depende de una variedad de factores: organizacionales, interpersonales e individuales. Si bien las organizaciones tienden a centrarse en los aspectos prácticos de sus operaciones (proporcionando los recursos necesarios para que sus equipos funcionen), a menudo se descuida el área menos tangible de la identidad y la dinámica del equipo. 

Antes de las últimas décadas del siglo XX, la falta de enfoque en la productividad del equipo y los factores que la impactan no solo se ha reflejado en las prácticas de las organizaciones, sino también en la teoría organizacional. Sin embargo, desde principios de los años 1980 en adelante, se puede observar un interés significativo en esta área en los trabajos de algunos de los autores más influyentes en temas de gestión organizacional, trabajo en equipo y dinámica de grupo, como Belbin (1981), Carnevale, Gainer & Meltzer (1990), o Katzenbach & Smith (1993). Estos autores, así como muchos otros, han ofrecido sus interpretaciones de los factores que impactan la productividad del equipo y sugerencias sobre cómo mejorar la efectividad de las relaciones profesionales. 

Apoyándose en el extenso trabajo de muchos académicos centrados en la productividad del equipo, los autores Isaksen y Laurel han identificado 10 características de los equipos productivos que sus predecesores han considerado relevantes para el éxito de las relaciones colaborativas. Examinaremos más de cerca cada una de estas 10 características y veremos qué pasos pueden tomar las organizaciones para desarrollar y adoptar estas características del equipo. 

Objetivos compartidos claros

Uno de los factores clave para una relación de colaboración exitosa es el establecimiento y la alineación colectiva en torno a objetivos de equipo claramente definidos y comunicados. En términos más simples, es esencial que todos avancen en la misma dirección con plena comprensión de cómo los esfuerzos individuales de cada uno contribuyen al logro de los objetivos compartidos. Isaksen y Laurel interpretan una “meta clara y elevada” como “tener comprensión, acuerdo mutuo e identificación con respecto a la tarea principal que enfrenta un grupo”, y añaden que el trabajo en equipo activo hacia una meta común tiene lugar cuando los miembros de un grupo comparten una visión común del estado futuro deseado. 

Cómo establecer objetivos claros y eficaces

Para establecer objetivos de equipo claros e introducir una visión rectora que los miembros del equipo puedan seguir, las organizaciones primero deben tener una comprensión sólida de lo que quieren lograr. Una vez que se haya logrado ese entendimiento, se trata de dividir el camino hacia los objetivos declarados en pasos y etapas viables. Hay muchos enfoques diferentes para establecer objetivos y no existe una forma objetiva de elegir uno que funcione mejor que otros. Sin embargo, sería descuidado no mencionar la práctica comúnmente utilizada de objetivos SMART (Specific - Específico, Measurable - Medible, Achievable - Alcanzable, Relevant - Relevante, y Time-bound - Con plazos determinados), tanto por su popularidad como por un conjunto bastante estructurado de acciones que los equipos pueden realizar para establecer sus objetivos sobre una base saludable.

Estructura basada en resultados

Una “estructura basada en resultados” es un concepto difícil de cuantificar. Si bien el consenso general sobre su significado implica lograr objetivos con un mínimo de complicaciones y destaca el enfoque en los resultados en lugar del proceso, los enfoques para la creación de dicha estructura pueden variar significativamente. 

Popularizado por Peter Drucker, uno de los pensadores de gestión más influyentes, en su libro de 1954 “The Practice of Management”, el concepto está marcado por un fuerte sentido de prioridades compartidas entre los miembros del equipo, una misión singular y un máximo enfoque en la ejecución. Como la aplicación del concepto depende en gran medida de la naturaleza específica del trabajo de un equipo, una estructura basada en resultados no es un enfoque único para todos, sino más bien una adhesión a un conjunto de principios y prácticas orientadas a lograr el máximo resultados con el mínimo esfuerzo. 

Cómo crear una estructura basada en resultados

Crear una estructura profesional centrada en los resultados es un proceso multifacético; Isaksen y Laurel identifican los siguientes factores como cruciales para este objetivo: 

• Comunicación abierta
• Coordinación de tareas clara
• Funciones y responsabilidades claras
• Supervisión del desempeño
• Feedback
• Juicio basado en hechos
• Eficiencia
• Fuerte gestión imparcial

En resumen, lograr una estructura impulsada por resultados se trata de optimizar procesos, esfuerzos y recursos para encontrar el camino más corto hacia el logro de los resultados deseados. 

Miembros del equipo competentes

Si bien esta característica puede parecer obvia, las malas elecciones de personal son uno de los obstáculos más comunes para una colaboración eficaz. Para que una relación de colaboración tenga éxito, los participantes deben poseer habilidades profesionales relevantes, pero también un fuerte deseo de contribuir, la capacidad de colaborar de manera efectiva, así como un enfoque de trabajo concienzudo y responsable. 

Cómo identificar buenos colaboradores

Para identificar y atraer profesionales que funcionen bien en un entorno colaborativo, las organizaciones deben ampliar su enfoque más allá de las habilidades profesionales necesarias. La colaboración es un esfuerzo colectivo que requiere que los participantes interactúen entre sí, lo que requiere un conjunto completo de habilidades que van más allá del conocimiento de su ámbito profesional. 

Compromiso unificado

Esta característica puede reformularse como “anteponer el equipo al individuo”. El compromiso unificado es la dedicación compartida al propósito y la visión comunes del equipo, reflejado en el apoyo mutuo, el compromiso con el desempeño de las tareas individuales y lo que Isaksen y Laurel describen como un “grado productivo de sacrificio” para alcanzar las metas organizacionales. 

Cómo generar compromiso en un equipo

El compromiso a nivel de equipo tiene sus raíces en una serie de factores. Todo comienza con la aceptación colectiva de la visión y los objetivos del equipo, se extiende desde una definición clara de roles y responsabilidades, y crece a partir de una serie de prácticas afirmativas, desde el apoyo y el estímulo hasta los elogios y el reconocimiento, además de proporcionar el grado adecuado de desafío profesional y de dejar margen para el error. El compromiso individual de los miembros del equipo es recíproco a su sentido de valor y aprecio como colaboradores.

Entorno colaborativo

Una relación de colaboración productiva no crece en el vacío. La colaboración eficaz requiere un clima de apoyo que promueva y permita la colaboración. Un factor que Isaksen y Laurel reconocen como crucial para el desarrollo de un clima de colaboración es la confianza mutua: la fe en la capacidad de los demás para contribuir al éxito de su relación profesional y al logro de objetivos colectivos. 

Cómo fomentar un entorno colaborativo

Una vez más, no existe un conjunto de prácticas universalmente aceptadas diseñadas para construir un entorno más colaborativo, sino un conjunto de principios rectores que las organizaciones pueden utilizar de diversas maneras. Algunos de los principios clave para fomentar un clima colaborativo son: 

• Apoyo ejecutivo: inversión organizacional en la promoción y refuerzo del trabajo en equipo y las prácticas colaborativas
• Dar ejemplo: participación activa en actividades colaborativas por parte de empleados y ejecutivos de alto nivel
• Guiar: actividades formales e informales orientadas a la transferencia de conocimientos y experiencias de los miembros superiores de las organizaciones a otros con el fin de crear una cultura cooperativa
• Construir una comunidad: centrarse en actividades colectivas que refuercen las relaciones interpersonales entre los miembros del equipo y creen un sentido de pertenencia a una comunidad de profesionales 

Estándares de excelencia

Una característica común de los equipos de alto rendimiento identificados es su cumplimiento de claros estándares de excelencia establecidos. El establecimiento de estos estándares tiene sus raíces en la comprensión y aceptación colectiva explícita de las normas de su trabajo, así como en el compromiso individual, la motivación y una dedicación constante a la mejora. 

Cómo establecer estándares de excelencia

La excelencia es un término relativo que, en última instancia, lo define cada organización. El primer paso en este proceso es establecer expectativas claras de todos los individuos y transformarlas en normas a través de la responsabilidad mutua, respaldada por evaluaciones cuantificables y objetivas de la calidad del trabajo individual, así como del trabajo del conjunto. 

Apoyo y reconocimiento

Los miembros productivos del equipo están motivados y su motivación depende en gran medida de su sentido de valor para el equipo. Este valor se demuestra a través de recompensas y reconocimiento, tanto para el individuo como para el equipo en su conjunto. Brindar reconocimiento por las contribuciones individuales a un equipo puede ser un fuerte impulso para mantener un alto nivel de motivación y energía de los miembros del equipo. A nivel de equipo, el reconocimiento del valor de un equipo para toda la organización y el apoyo y aprobación organizacional también son fuertes motivadores. 

Cómo reconocer a tu equipo

Las manifestaciones prácticas de dar reconocimiento dependen en gran medida de la cultura específica que alberga una organización. En lugar de centrarse en ejemplos de reconocimiento de empleados, es más importante adherirse a los principios fundamentales que garantizarán que el reconocimiento sea efectivo. Dos de las cosas más importantes a tener en cuenta son la objetividad al identificar y resaltar las contribuciones más relevantes y la coherencia al adherirse a los mismos estándares para el reconocimiento de los logros. 

Uso adecuado del equipo

La colaboración eficaz es un arma poderosa en el arsenal organizacional. Sin embargo, no siempre es la mejor manera de lograr la máxima productividad. A veces podemos lograr resultados mejores y más rápidos mediante el trabajo independiente, y aprovechar el esfuerzo de un equipo en tales situaciones puede ser menos efectivo e incluso perjudicial para la productividad del equipo. Los equipos colaborativos solo pueden ser productivos en situaciones que requieren un esfuerzo colaborativo y abusar de un equipo o usarlo para escenarios inapropiados no dará los mejores resultados.

Cuándo utilizar un esfuerzo de equipo

Elegir cuándo colaborar es un arte delicado que requiere un poco de experiencia y prueba y error. Involucrar a todos los miembros del equipo en el proceso de elegir el mejor camino a seguir y encontrar el enfoque correcto para cualquier situación dada es una práctica sólida que asegurará el consenso, mientras que la evaluación posterior de la efectividad del enfoque elegido informará las decisiones futuras. 

Participación en la toma de decisiones

La inclusión de todos los miembros del equipo en el proceso de toma de decisiones sobre todas las cuestiones relevantes para el curso del proyecto fomenta el trabajo en equipo y genera aceptación colectiva y responsabilidad compartida. Los equipos productivos involucran a todos al identificar desafíos y oportunidades, generar ideas y resolver problemas. Además, participar en la toma de decisiones aumenta la apropiación del trabajo compartido y, por tanto, la motivación para contribuir a los objetivos compartidos. 

Cómo fomentar la implicación de los empleados en la toma de decisiones

La forma más eficaz de toma de decisiones colectiva, especialmente en equipos pequeños, es la comunicación directa. Sin embargo, no todos los participantes están igualmente dispuestos a aportar sus puntos de vista. Se les debe alentar directamente a involucrarse e impactar el curso de su trabajo compartido, pero las organizaciones también pueden optar por un enfoque más anónimo, como buzones de sugerencias y cuestionarios. 

Espíritu de equipo

Un hilo conductor entre los equipos productivos es el alto grado de relaciones interpersonales entre sus miembros. Una conexión personal entre los colaboradores aumenta su motivación y su inversión en el éxito de su esfuerzo conjunto. Esta conexión se construye principalmente al trabajar unos con otros, pero también a través de actividades grupales "extracurriculares", desde socializar fuera del horario laboral hasta diversas actividades de team building. 

Cómo fomentar el espíritu de equipo 

El desarrollo del espíritu de equipo comienza con el proceso de selección y se centra en las personalidades adecuadas que puedan trabajar bien juntas. Una vez que se logra esa combinación, el espíritu de equipo se desarrolla aún más fomentando actividades colectivas e incluyendo a todos en esas actividades, ya sea almorzando juntos o disfrutando de una bebida después de un largo día de trabajo. 

Mejora la productividad del equipo con Pumble

A medida que exploramos sus características principales, se hace evidente que los equipos productivos necesitan aprovechar las herramientas adecuadas para lograr el éxito. Pumble, con su sólido conjunto de funciones útiles, surge como un punto importante a la hora de agilizar la comunicación y la coordinación dentro de los equipos. 

Al proporcionar capacidades fluidas de mensajería directa, intercambio de archivos, y seguimiento de proyectos, Pumble permite a los equipos trabajar juntos para lograr objetivos comunes, lo que en última instancia mejora la productividad y fomenta un ambiente de trabajo beneficioso. Entonces, si quieres mejorar la productividad de tu equipo, integrar Pumble en tu flujo de trabajo podría ser la clave del éxito.

¿Estás listo para revolucionar la productividad de tu equipo? Transforma la forma en que tu equipo trabaja — ¡regístrate en Pumble!